Dar relevancia a la educación superior es clave en la competitividad de Iberoamérica.
Dar relevancia a la educación superior es clave en la competitividad de Iberoamérica.
La educación superior es clave en la competitividad Iberoamérica si se le asigna la relevancia necesaria. Esto significa que se tome a la educación superior como importante en el mercado laboral desde una perspectiva integral y holística. De este modo se incluyen habilidades transversales en su modelo educativo y se intensifica el aprendizaje. Como consecuencia, es posible alinear los perfiles de los graduados a las necesidades específicas del mercado laboral. Con lo cual, se mejora la competitividad y productividad Iberoamericana.
De acuerdo al informe titulado “Educación superior, competitividad y productividad en Iberoamérica”, la educación superior juega un papel en la formación de trabajadores productivos. Este lo auspicia la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, mediante su Instituto Iberoamericano para la Educación y la Productividad.
Según precisa una de las autoras del informe, Victoria Galán-Muros, en el estudio se realizan una serie de recomendaciones dirigidas a universidades, empresas y gobiernos. En estas recomendaciones manifiesta que «únicamente una acción coordinada entre los tres actores puede afrontar con éxito los retos actuales y el futuro incierto» al que se enfrenta la región de Iberoamérica”.
Resolviendo el problema de la competitividad y productividad
Germán Ríos, otro de los autores y director del Observatorio de América Latina del Instituto de Empresas, habla de algunas deficiencias de los estudiantes.
«Por primera vez en la historia de Iberoamérica tenemos números récord de estudiantes, pero ahora de lo que las universidades se tienen que preocupar es de cómo hacer que estos estudiantes nos ayuden a resolver el problema de la productividad y la competitividad», sentenció, al tiempo que valoró el que la mayor parte de las universidades analizadas estén ya introduciendo esas habilidades blandas en su currículum, si bien estimó que lo «ideal» sería que las introdujeran de manera «transversal», manifiesta Germán.
Por otra parte, el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, se refirió a los “desafíos más importantes” que enfrenta Iberoamérica y el resto del mundo en estos momentos para “salir del agujero y lograr la recuperación».
«Mejorar la relevancia y los resultados de ese nivel de formación va a requerir de una visión estratégica, de un enfoque común, de un involucramiento de todo el sistema educación superior», comenta el secretario general. Además manifiesta que el aprovechamiento de la transformación digital es clave para aumentar la productividad.
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