En las ciudades, las áreas verdes son de gran ayuda para los niños. Estos espacios, según un estudio desarrollado en Bélgica, y publicado recientemente en la revista Plos Medicine, colaboran para el desarrollo cognitivo.
Los autores del estudio buscaron los datos de más de 600 niños, entre 10 y 15 años, para ver cómo el acceso a las áreas verdes en las regiones metropolitanas podría influir en las pruebas de Cociente de Inteligencia (CI). El cociente de inteligencia es un valor estimado, calculado mediante pruebas que se desarrollaron para evaluar las capacidades cognitivas de una persona.
Los resultados de la encuesta mostraron que los niños cerca de parques y jardines, y otras áreas verdes de la ciudad, tenían mejores valores. En el estudio, el promedio elegido en las pruebas de CI fue de 105, pero el 4% de los niños que crecieron en ambientes con menos vegetación tenían puntos por debajo de 80.
Los investigadores creen que estos lugares permiten ambientes más tranquilos y con menos estrés, además de brindar momentos de más contactos sociales.
Ahora, con la pandemia, la búsqueda de lugares abiertos puede ser una posibilidad para que los centros educativos replanteen la forma de enseñar exclusivamente en lugares cerrados, optando también por experiencias educativas en áreas verdes.
Además, el estudio ha contribuido a las políticas urbanas en las ciudades que deben tener en cuenta la importancia de los espacios verdes para el desarrollo infantil, tanto físico como mental.
Fuente: Estudo revela que crianças com acesso a mais espaços verdes têm QI mais elevado
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