El uso de autobuses eléctricos en Latinoamérica se marcha sobre ruedas para ayudar al medio ambiente
En Latinoamérica, el uso de autobuses eléctricos se ha puesto en marcha para ayudar al medio ambiente. El reemplazo de vehículos que utilizan gasolina por eléctricos es algo que se puede imitar en todo el mundo, de acuerdo al informe del C40 y IFC.
El informe ha sido realizado por el órgano del Grupo Banco Mundial para el sector privado (IFC). A su vez, ha colaborado C40, una red de ciudades comprometidas a frenar el cambio climático han realizado un informe medioambiental.
“Las soluciones de cero-emisión en el tránsito, tales como los autobuses eléctricos, ofrecen a las municipalidades una oportunidad de descarbonizar el transporte público.”, señala el informe. Además ayuda a “reducir la contaminación del aire y crear trabajos verdes locales.”
Países ejemplares
A pesar de la difícil situación que se vive en Latinoamérica, muchos países están logrando avances tecnológicos y medioambientales significativos. Países como Chile y Colombia son unos de los más destacados por sus acciones sostenibles. La capital chilena, Santiago, cuenta con 776 autobuses eléctricos. Mientras que Bogotá, anunció en enero que modernizará la flota de Transmilenio con 596 autobuses nuevos, para un total de 1.485 vehículos eléctricos.
Transformación de modelos antiguos
Latinoamérica está liderando con su modelo distinto al de otras ciudades del mundo. En el cual los autobuses son propiedad de un organismo público o de un solo operador privado, que adquiere, opera y mantiene la flota según los requisitos del contrato. Sin embargo, “Por distintos motivos, ninguna de estas partes está posicionada como para liderar una transición a gran escala , con base en inversiones, hacia flotas eléctricas sin modificar los modelos de negocio subyacentes”, agrega el estudio.
El problema de estos modelos se agrava tomando en cuenta la pandemia. Gracias al Covid-19, entre marzo y abril del 2020 se disminuyó considerablemente el número de pasajeros en el transporte público.
Esto sugiere que, en un entorno donde los líderes y protagonistas tradicionales no pueden gestionar la transición hacia los e-buses (autobuses eléctricos), se necesitan nuevos modelos.
El leasing es un componente clave para la operación exitosa de flotas en otras industrias como el transporte o los aviones. Este modelo podría ayudar a las ciudades a modernizar sus flotas corriendo menos riesgos . Asimismo, ofrece mayores chances de éxito, de acuerdo al informe.
Una solución sostenible y rentable
Esta transformación, que conlleva muchos desafíos, también conlleva muchas ventajas. Y, la buena noticia es que a medida que los costos de adquisición y operación disminuyen, los autobuses eléctricos surgen progresivamente como una alternativa rentable a los vehículos impulsados por combustibles fósiles.
“Con la fuerza bruta de la tecnología, el historial y la producción a escala, lo mismo ocurrirá con el mercado de autobuses eléctricos, impulsado por gobiernos deseosos de limpiar sus sistemas de transporte y un conjunto de jugadores del sector privado (incluidos inversores, bancos, fabricantes y aseguradoras) que quieren invertir en el sector de la infraestructura sostenible. El secreto es alinear esta intrincada red de partes interesadas para generar competencia, transparencia y un retorno razonable para todos los protagonistas”, subraya el informe.
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Fuente: El uso de autobuses eléctricos marcha sobre ruedas en Latinoamérica , Leading a Clean Urban Recovery with Electric Buses
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