¿Sabías que casi la mitad de la población adulta y el 20% de los niños tienen problemas para conciliar el sueño?
Según los últimos datos de la Sociedad Española de Neurología, en España el 48% de la población adulta y el 25% de la población infantil no tiene un sueño de calidad, y más de cuatro millones de personas sufren algún tipo de trastorno grave del sueño.
Dormir bien es fundamental para tener una buena salud, es un requisito esencial para la vida humana. Una mala calidad del sueño aumenta el riesgo de sufrir problemas cardiovasculares, diabetes, obesidad, problemas de salud mental y disfunciones neurocognitivas, entre otras muchas cosas.
Hay tres factores principales que determinan un buen sueño: la duración, la continuidad y la capacidad de alcanzar fases de sueño profundo. Los adultos deberían dormir entre 7 y 9 horas por noche, con las mínimas interrupciones posibles. Cuantas más interrupciones, peor será la calidad del sueño.
Puede ser difícil mejorar los hábitos de sueño, pero hay algunas cosas que es importante tener en cuenta: mantener horarios y rutinas regulares para acostarse y levantarse, hacer ejercicio, comer comidas ligeras y tratar de no utilizar ordenadores o dispositivos móviles antes de acostarse.
La Universidad Internacional Iberoamericana (UNIB) promueve estudios relacionados con este tema, como:
Fuente: La importancia (y la felicidad) de dormir a pierna suelta para tener una salud completa
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